jueves, junio 24, 2010

boquitas pintadas

¿cuál era su mayor deseo?

no quiero ilusionarme demasiado, pero cómo me encantaría... no sé, que argentina continúe guerrera hasta la final, y que jogo bonito también lo haga y luego ahí se enfrenten ambos equipos como soldados de la guerra del peloponeso (la referencia helénica es malísima, pero viene a cuenta del último partido, lleno de olímpicos dioses que nada pudieron contra la diablada rioplatense) y más luego... ah, la irracionalidad de la venganza... llegar (yo) temprano y sigilosa a estas oficinas y sembrar amorosamente de banderitas celestes y blancas los escritorios enemigos.

y de paso que en el camino quede o' higgins también despanzurrado no vayan a olvidar los trasandinos quién manda en materias futbolísticas.